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Reportaje a Arturo Acevedo, Presidente de Acindar SA

"El país necesariamente deberá continuar acelerando las inversiones en el tema energético"

¿Piensa usted que la provisión de energía se encuentra en conflicto con el Medio Ambiente? ¿Por qué?

La disponibilidad de energía es un indicador del desarrollo y de la calidad de vida del hombre. Su utilización no atenta contra el medio ambiente. Su uso debe ser racional para que no se generen conflictos, por lo que debe evitarse el uso inadecuado o derroche. Es importante que se realice el desarrollo de fuentes alternativas de provisión, especialmente de aquellas que sean renovables.


¿Cómo afecta a su proceso productivo la provisión de energía? ¿Es un insumo crítico?

Dentro de nuestro esquema productivo uno de los factores críticos es el insumo energético, tanto de gas como de energía eléctrica. Acindar es una compañía con un proceso integrado que parte del mineral de hierro (óxido) y mediante procesos de reducción del mismo con gases provenientes del gas natural (con un uso intensivo) obtiene el hierro en forma adecuada para introducirlo en el proceso de fusión en hornos eléctricos. Esta carga metálica necesita para su fusión y transformación en acero de energía eléctrica. Como se puede observar, tanto en la primera fase como en la segunda la energía, en cualquiera de sus formas, juega un papel fundamental en nuestro ciclo productivo.


La energía actual proviene, en su mayoría, de los combustibles fósiles. ¿Esto es una preocupación para usted? ¿Por qué?

Siempre es una preocupación la utilización que hacemos de los recursos no renovables. Estamos avanzando lentamente en el desarrollo de otras fuentes de energía alternativas que podrían asegurarnos, en el largo plazo, contar con un insumo crítico en cantidades suficientes para el progreso del país.


¿Su empresa podría transformarse para consumir energías alternativas (biocombustibles, eólica, hidrógeno, etc.)? ¿Qué tiempo le demandaría la conversión?

Nuestra compañía consume energía eléctrica y corresponde a la generadora evaluar el mejor combustible a utilizar para el proceso. Desde el punto de vista del gas, este insumo es crítico debido a que no puede reemplazarse por el tipo de proceso que se realiza en reducción directa.


¿Cómo ve usted el futuro en el tema energético en los próximos 15 años? ¿Las energías alternativas son una moda o constituyen una necesidad?

El país necesariamente deberá continuar acelerando las inversiones en el tema energético debido a que si se quiere continuar con el crecimiento, haciendo que el mismo sea sustentable en el tiempo, tendrán que realizarse cambios en la matriz energética actual que es sumamente dependiente del gas. Las energías alternativas son especialmente valiosas en términos de permitir, en un futuro, un reemplazo energético en todos aquellos procesos en los cuales podrían aplicarse con propósito de obtener un mejor aprovechamiento de las reservas gasíferas.


Casi todas las formas de energías alternativas deben hoy ser subsidiadas si el petróleo cotiza a menos de U$$ 70 el barril. ¿Cómo cree usted que se subvencionará esta provisión en la Argentina?

Como con todos los desarrollos deberán realizarse las inversiones necesarias y hacer que las mismas sean cada vez más productivas por lo cual la curva de explotación será más rentable con el correr del tiempo. Creo que una forma correcta de subvencionar esta provisión, hasta que se logre el punto de equilibrio, sería que todos aquellos que comiencen a utilizar estas energías alternativas en forma demostrable, cuenten con un beneficio impositivo que les permita seguir avanzando en esta línea.


A su juicio ¿cuál será en el futuro (20/30 años) la energía que tendrá mayor preponderancia? ¿Cuál es la que tiene mayores posibilidades de éxito?

No estoy capacitado para responder a esta pregunta. Me parece oportuno que sea un especialista del área quien dé una visión de largo plazo sobre este punto.


¿En su empresa, usted está previendo algún cambio en este sentido, o espera que su decisión futura se adapte a condiciones exógenas?

Hemos realizado algunos estudios tendientes a reemplazar la actual provisión de gas por GLP (gas licuado de petróleo), pero no fueron más que estudios que tenemos en carpeta. Todos estos cambios conllevan un gran esfuerzo económico y mucha coordinación para ponerlos en práctica.


¿Usted cree que el Gobierno debe impulsar la adopción de energías alternativas, o debe esperar que las empresas sean las que tomen la iniciativa en ese sentido?

No nos toca a nosotros definir la política de Estado con respecto a la provisión futura de energía. Existen distintos organismos oficiales que están capacitados para realizar esta evaluación y creo que les corresponde a ellos realizarla. No me parece que sean las empresas las que tengan que tomar la iniciativa, más allá de evaluar distintas alternativas para asegurar el ciclo productivo.