Virgen del Jardín

 

Oh, Virgen María

el solo mirar tu imagen en mi jardín

me hace pensar

cómo has hecho, por tanto tiempo existir.

 

Saber que eras una mujer

y sentir ahora tu poder,

me hace pensar cuanto has de gozar

mirando a todos desde tu lugar.

 

El verte ahí firme.

Cabeza inclinada,

aceptando nuestras manchas.

 

El ver tus manos extenderse

aceptando la gente se te acerque.

 

El ver tu manto teñido de verde

demostrando ahí te quedaras

para que nosotros podamos verte.

 

Mirarte rodeada de flores

pero sin permitir ellas te trepen.

 

Todo eso me dice:

Vos siempre sobresaldrás

entre tanto espacio verde

 

Ahora te pido:

que quien se te acerque,

y una oración te dejara de presente,

con tu bondad

lo ilumines para siempre.

 

Tomás Thibaud

12 de octubre de 2002