Reportaje a Arturo Tomás Acevedo, Presidente de Acindar Industria Argentina de Aceros SA

"Todas las compañías pueden colaborar minimizando los efectos sobre el cambio climático mediante un uso racional de la energía"


¿Cree usted que el Cambio Climático es una consecuencia de las acciones del hombre, o es solamente una evolución de la naturaleza que no podemos controlar?

La comunidad científica internacional confluye ampliamente en que es la actividad del hombre la principal fuente de emisiones de gases efecto invernadero. Actividad del hombre significa no solamente formas de producción sino también patrones de consumo cada vez menos sustentables.

¿Considera usted que su empresa podría realizar alguna acción que ayude a minimizar el Cambio Climático? ¿Cuál/es?
En Acindar venimos trabajando en toda la problemática ambiental en forma consistente. Hemos llevado adelante distintas acciones tendientes a la optimización en el funcionamiento de los hornos y elementos auxiliares. En lo específico, tenemos una serie de programas relacionados a eficiencia energética y por ende al control de las emisiones de gases.

¿Su proceso productivo y/o comercial tiene incidencia concreta que acentúe sobre el Cambio Climático?
Justamente por nuestras características tenemos la ventaja de no utilizar carbón como base energética, lo que en materia de emisiones de CO2 es una gran diferencia positiva.
Hay que observar la cadena de valor de una determinada actividad; no sólo producto de la operación de nuestra planta, sino también analizar el ciclo de vida, es decir tener perspectiva del impacto del producto cuando está en manos de otros actores. Evaluando lo que comentamos, aguas arriba encontramos a los proveedores y aguas abajo a los clientes y consumidores.
Cambio climático es el tema ambiental donde es más que universalmente válido el concepto de contemplar las responsabilidades de todos los que intervienen en la cadena de valor.

¿Qué papel cree usted que juega el Estado en este proceso de minimización del Cambio Climático?
El estado debe escuchar y enriquecerse colaborando junto a las distintas industrias y actividades de la vida económica, estableciendo objetivos de largo plazo y reglas de juego claras en materia de clima y energía.
Justamente este es el enfoque que en Naciones Unidas se está adoptando para el proceso que definirá el marco posterior al protocolo de Kyoto.
Pero hay que tener cuidado con la legislación que se genera debido a que estos temas ambientales, hoy tan en boga, son demasiado complejos para tratarlos sin un adecuado debate con todos los interesados en función de lograr un objetivo claro y cumplible para todos y que beneficie a la comunidad.

¿Cree usted que las energías alternativas pueden ser una solución en el corto, mediano o largo plazo?
Dependiendo de las posibilidades de cada una de las regiones/países, podrían ser una solución a largo plazo, pero habría que evaluar cada una de las alternativas y ver la conformación futura de la matriz energética.
De todas formas, si no se centran los esfuerzos también desde el lado del consumo y seguimos con los actuales estándares, no se va a llegar al 2030 con una oferta energética muy diferente en su composición actual.
Lo más realista, es pensar en un mix de soluciones, donde las energías alternativas sean justamente, uno de entre otros componentes.

En su empresa, ¿se plantean la temática de Cambio Climático como una variable a tener en cuenta en el corto plazo, o es algo exógeno que será abordado cuando afecte directamente las operaciones de la Compañía, si es que ello ocurriese?
En Acindar tenemos claro, tal como lo expuse, que debemos trabajar todos los días en estos temas con el propósito de minimizar el impacto ambiental, tanto local como global. Trabajamos en estos temas desde hace ya mucho tiempo y una muestra de ello son nuestros reportes ambientales que elaboramos y damos a conocer todos los años.
Por otro lado, todas las compañías pueden colaborar minimizando los efectos sobre el cambio climático mediante un uso racional de la energía. Es importante destacar que existen distintas organizaciones de carácter global, regional y a nivel país que se ocupan de trabajar conjuntamente con las empresas para lograr una concientización en estos temas.
El Consejo Empresario Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD) es una red mundial de consejos empresariales que trabaja desde hace ya largo tiempo en todos los temas referidos a la sustentabilidad. En el orden local, el Consejo Empresario Argentino para el Desarrollo Sostenible (CEADS), con más de 50 empresas de primera línea como socios, es una clara muestra de que en nuestro país se ha instalado seriamente el tema y se está trabajando consistentemente en la sustentabilidad.