-
-
-
   

Entrevistas


“En regiones donde su economía está basada en la agricultura, el clima juega un papel fundamental”

Entrevista con la Dra. Matilde Rusticucci, meteoróloga, investigadora y profesora de la Universidad de Buenos Aires, especialista en eventos extremos del clima y cambio climático.

 

Usted se dedica al estudio de los cambios climatológicos extremos. ¿Cuáles son los impactos económicos y sociales más relevantes de la variabilidad del tiempo en Argentina y en la región Mercosur hoy? ¿Cómo se vincula esto con la problemática general del cambio climático?
Las anomalías climáticas extremas tienen un impacto negativo en los habitantes y la economía de las zonas afectadas. En regiones donde su economía está basada en la agricultura, el clima juega un papel fundamental: las temperaturas extremas pueden afectar seriamente el proceso de crecimiento y rendimiento de los cultivos y la precipitación, puede ser el factor limitante que condiciona el éxito o fracaso de estas actividades productivas. Más aún, la ocurrencia de valores extremos, como por ejemplo las olas de calor o frío, o prolongados períodos húmedos o secos, producen importantes pérdidas económicas ya que tienen un reconocido impacto social. No está de más citar, el tremendo impacto que ocasionó la ola de calor sobre Europa en 2003 (más de 5.000 muertos en París, interrupción de los servicios de trenes, incendios, destrucción de cultivos, etc.) o las inundaciones repentinas, como la ocurrida el año 2003 en Santa Fe. El impacto de la variabilidad y el cambio climático en el medio ambiente y en las actividades del hombre (económicas, agricultura, salud, etc) depende principalmente del cambio en la frecuencia de ocurrencia o la intensidad de los eventos extremos. El IPCC (2001) indica que los impactos del cambio climático serán particularmente advertidos a través de cambios en los eventos extremos, y esos cambios son extremadamente importantes debido a que ellos podrán causar tensión o exceder nuestras adaptaciones presentes a la variabilidad climática. El estudio de los cambios pasados en la ocurrencia de estos extremos nos permite por analogía prever sus cambios en el futuro, así como utilizar los resultados para validar modelos que construyan escenarios futuros.

¿Qué líneas de investigación se desarrollan en nuestro país vinculadas al cambio climático?
Entre otras, el estudio de las tendencias de extremos de temperatura y precipitación y escenarios futuros de aumento del nivel del mar y sus impactos en la cuenca del Plata.

¿Cuáles son las consecuencias del cambio climático más apremiantes y sobre las que deberían desarrollarse investigaciones específicas?
Evaluar la posibilidad del aumento de ocurrencias de situaciones extremas del clima, mejorar el conocimiento sobre la predictabilidad climática en la región, ya que posee baja predictabilidad. Un mejor pronóstico de la precipitación, por ejemplo, haría que económicamente resulte en mayor aprovechamiento de la agricultura. El aumento de temperatura se nota fundamentalmente en el aumento de ocurrencia de eventos extremos, en particular, en Argentina, la cantidad de noches frescas en verano, disminuyó significativamente en los últimos años afectando el normal descanso de la población.

Como miembro del IPCC, ¿cuáles son sus expectativas para la COP X?
Como Lead Author del WGI del 4AR, y basándome en el assessment anterior (2001) espero que todos los países orienten sus políticas hacia el uso de energías limpias y cuidado de las reservas naturales y el medio ambiente, ya que los resultados mostraron que el aumento repentino de la temperatura de los últimos años es debido a la acción del hombre.

¿Qué papel le cabe a la comunidad científica argentina en relación a esta problemática? ¿Y al Estado y las empresas?
La comunidad científica debe orientar sus investigaciones hacia una mejor evaluación del cambio climático y hacia el conocimiento de la variabilidad climática de nuestra región. El Estado debe apoyar las investigaciones con mayor presupuesto. Pero considero que como política de Estado, se debería crear un instituto nacional del cambio climático, en el cual participen activamente investigadores de todas las áreas relativas al cambio climático, meteorología para entender el problema, ya que su origen se vincula con la atmósfera, la química, la biología, lo social, etc. En otros países existen institutos nacionales o provinciales para el cambio climático, o secretarías (o subsecretarías) para el cambio climático que permiten llevar a cabo políticas serias para aprovechar los efectos no sólo negativos, sino también los positivos del cambio. Las empresas debieran ver el lado económico de fomentar las investigaciones en estos rubros, o específicamente, incorporar a sus filas a profesionales de la meteorología, que puedan adecuar las investigaciones concretamente a sus requerimientos, que les permitan planificar a futuro sus inversiones y aprovechar estos resultados más específicos.


-
-
-